Los organizadores de la ceremonia del Oscar confirmaron al portal especializado Variety que los nominados, sus invitados, los presentadores de los premios y otros asistentes no tendrán que cubrirse la nariz y la boca mientras se encuentren delante de las cámaras.
Sin embargo, añadieron, en los momentos en que no participen directamente en la transmisión de la entrega de premios, se les indicará que deben llevar puestos sus cubrebocas para reducir el riesgo de contagio.
En la práctica, esta medida implica que sí deberán ponerse las mascarillas, por ejemplo, durante las pausas comerciales o cuando estén lejos de las cámaras.
El objetivo de este plan de acción que se acaba de hacer público es garantizar que la entrega del Oscar siga siendo un espectáculo televisivo atractivo para la audiencia. También se han puesto en marcha una serie de medidas adicionales para garantizar la seguridad de todos los asistentes a las que se ha destinado un tercio del presupuesto total del evento.
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