Dueño de un carisma único, Pedro Fernández ha conquistado al público desde niño. Apenas había cumplido siete años cuando pisó por primera vez un escenario, y su talento hizo que figuras como su padrino, Vicente Fernández, lo impulsaran a seguir por el camino de la música.
Luego vino su incursión en el cine, más tarde se convirtióen ídolo pop, y finalmente logró un lugar privilegiado como uno de los exponentes más representativos de la música ranchera, aunque no se toma en serio los títulos, y hasta hoy sigue entregándose al trabajo como el primer día. Hace unos días (28 de septiembre) cumplió 51 años, y aunque no hubo grandes festejos, platicó con nosotros sobre el momento de plenitud que vive actualmente y sus planes.
“Festejé muy tranquilo en casa, como la mayoría de la gente en esta época, pero feliz de estar mi mujer, mis hijas y mi nieto. Tuvimos una comida familiar, me regalaron unas camisas y unos pants que yo quería desde hace tiempo, y la pasamos muy contentos, felices de poder celebrar un año más de vida”.
Acompañe siempre a todos. Hoy más que nunca tenemos esa prioridad, pues ante la pandemia nos damos cuenta de la vulnerabilidad que tenemos como seres humanos, así que lo primero es pedir salud, porque teniéndola, hay oportunidad de seguir creando, disfrutando de la vida y de nuestros seres queridos.
Me siento muy orgulloso porque no ha sido fácil, son 42 años de altibajos, trabajo, disciplina y entrega. Afortunadamente los momentos buenos han sido más que los no tan buenos, pero lo que más valoro, independientemente del apoyo de mi familia, es el amor incondicional que siempre me ha demostrado el público.
Nada de lo que soy hubiera sido posible sin el apoyo de los fans, que siempre están pendientes de mis proyectos. Veo hacia atrás con satisfacción y con una gran motivación para seguir adelante, porque no hay mucha gente que a mi edad tenga una carrera tan larga, con tantos éxitos y tantas cosas tan buenas.
No creo que haya ninguna fórmula, pero es importante tener constancia, disciplina, entrega, perseverancia y, obviamente, tratar de arroparnos con gente talentosa. Nunca he tenido una visualización del futuro. Cuando comencé de niño pasaba mi día a día entre conciertos, viajes, películas, entrevistas, grabaciones de discos, y nunca me detuve a pensar qué quería yo 20 o 30 años adelante.
Poco a poco me fue cayendo el veinte y logrando sueños a corto plazo; cuando hice Hasta que el dinero nos separe, luego de 17 años lejos de la televisión, o cuando grabé Yo no fui, que fue la canción más escuchada por mucho tiempo, fueron momentos que no planeé, pero que me han permitido seguir aquí.
Leave a comment